Descripción
Mario Arturo Coral
Tío de Pedro Coral Lizardi, asesinado por funcionarios de PoliBolívar. Testigo del crimenAudio completo y transcripción de la entrevista realizada por Oriana Faoro
Nombre del entrevistado: Mario Coral
Fecha de nacimiento: No informa
Edad al momento de la entrevista: 63
Género: Masculino
Nivel de educación: No informa
Ciudad: San Félix
Municipio: Caroní
Estado: Bolívar
Región: Guayana
¿El entrevistado es víctima directa de algún incidente relatado?: Sí
Fecha o rango de fechas del incidente mencionado en la entrevista: 10/03/2018
Temas de derechos humanos relacionados: Vida
Tipo de violencia (si aplica): Física
Agresor: Organismo policial
Consecuencias de los hechos relatados: Salud mental y conductual
Transcripción
-¿Qué pasó ese día? ¿Fue en marzo que ocurrió todo?
- Sí, fue en marzo, El 10 de marzo… Como estoy viejito, y se me olvida todo…
Bueno, estaba a que un hijo mío Llegué aquí (a su casa) como a las 6:30 (de la tarde) y me acosté. Estaba yo solito y me acosté, estaba oyendo música, cuando me abrieron la puerta, funcionarios pues, abrió la puerta y pasó para donde estaba el muchacho (sic). Después se regresó otra vez y se regresó a hablar conmigo, me dijo “quédese tranquilo viejito, que no le va a pasar nada, acuéstese ahí, no esté saliendo par afuera porque puede pasarle algo, duerma, duerma, porque puede pasarle algo, sabe cómo son las cosas”.
Ellos conmigo no se metieron, en ningún momento. Cuando pasaron pa’ allá fue que oí unos golpes, pum, pum, pum, y después oí los tres disparos. Después él pasa (a su cuarto) y me dice “¿tú oíste los tres disparos?” y le digo “sí”, y me dice “¡Cónchale! Me afrentó, ¿oíste? Me sumbó uno y tuve que lanzarle dos (disparos)…”. Yo dije “¿sí…?”, después me dice, hablando conmigo en el cuarto… Yo estaba enfermo ese día, tenía fiebre, pero ellos decían que yo estaba era borracho… Después entra uno y me dice dice “¿Tú no tienes por ahí el arma de él, no la tienes aquí guardada?” y yo digo “¡Miércoles! ¿Y con qué te disparó él entonces? Si tú andas buscando arma y yo no tengo arma aquí”, ahí salieron… Volvió a pasar otro más, y me dijo lo mismo “viejito, quédese tranquilo ahí”, todos me decían eso, “que no estuviera saliendo para afuera, ni a estar inventando, duerma, duerma…”… y volvió a pasar otro tercero, y me decía lo mismo…
Yo salí después que ellos se fueron, ¿oíste? Porque yo de ahí no pude salir… me quedé quietecito, más que estaba enfermo… Los más que vieron fueron los que estaban aquí (afuera). Después de eso uno (policía) se recostó de aquí de la ventana, como estaba la ventana abierta, y le dice “pero ahí está uno acostado”, al que lo había matado (a su sobrino), que era uno negrito, él (el homicida) le dice “ese es un viejito que está borracho, ese no sabe nada de lo que está pasando aquí”, mentira, yo estaba despierto, solo que tenía cara de enfermo, fiebre y dolor de cabeza…
De ahí volvieeeron a pasar y fue que cerraron la puerta. Pero yo no sé nada, la puerta está abierta pero yo estoy encerrado, no estoy viendo nada…
-Usted estaba en su cuarto…
-Sí, tranquilo en este cuarto pero yo no vi cuando lo mataron, eso sí es verdad porque… los disparos sí, y sé que lo mataron ¡porque me dijo que lo había matado! Porque lo afrentó… después de eso volvieron a entrar, se encerraron ahí y me cerraron la puerta, porque estaban haciendo… limpiando todo eso por ahí… pero qué, se lo llevaron enseguida, inmediatamente… De ahí yo salí y estaba toda gente por aquí, la comadre, enfrentando esa gente, pero de ahí no me dijeron más nada, no supe más nada de ellos
-¿Estaba usted solo o ellos sacaron a los demás de la casa?
-Mi mamá había salido de aquí para la esquina, yo solito estaba aquí, él oyendo música en una esquina y yo, no había más nadie…
-¿Por qué vinieron a buscarlo a él?
-Porque hay un primo de él que estaba involucrado en la broma del carro, del asesinato… Trajeron a un muchacho, que habían agarrado, uno de los tres, y lo trajo hasta aquí, buscando al otro… Ahorita está preso.
Como Había otro familiar, que tiene el mismo nombre, se llama Pedrito, cuando le preguntaron por el otro, que se llama Alberto, que sí está preso, sobrino mío también… que no estaba… como 5 minutos que se había ido… y (al asesinado) cuándo le dijeron “¿tú cómo te llamas?” dijo “bueno, yo me llamo Pedrito”, bueno, tú eres… y ahí fue la confusión… y como el que lo trajo nunca le dijo que había dos Pedritos… Por eso fue que lo mataron, por tener el mismo nombre del que andaba involucrado.
-¿Y ese otro Pedro está preso?
-Los tres están presos. Alí, Pedro y el sobrino mío que se llama Alberto
-¿Es la primera vez que usted ve algo así en el sector, que la policía entra a su casa, o a casa de algún vecino?
-Hasta los momentos aquí fue que vi eso.
-¿Qué hizo usted después de eso?
-Salir pa’ afuera con la gente, porque la gente se vino, vecinos, vecinas, parece que golpearon y broma… no supe más, pues, me reuní con la gente que salió a la avenida, y no tuve más información, vino la PTJ (Policía Técnica Judicial, antiguo nombre del actual Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas)
-¿Qué dijo la PTJ?
-Te puede declarar la que estaba sentada aquí, porque ella sí ha ido a mí no me han dejado declarar porque soy familiar… a ella sí, mi comadre sí, sabe qué han dicho, declaró… a mí nunca me han dejado declarar…
-¿Cómo era su sobrino?
-Gordito así como el papá
-¿Cómo lo describiría usted, a qué se dedicaba…?
-Él trabajaba por la panadería La Revancha, lavaba carros, cualquier cosa hacía para sobrevivir…
-¿Cómo fue para usted estar en el otro cuarto escuchando todo?
-Oye, terrible… Terrible, porque sin poder salir, sin poder defender, porque ¿Qué podía hacer yo contra esa gente? Porque después vinieron refuerzos… pidieron refuerzos porque la gente aquí los tenía acorralados… Yo te digo que salí cuando ellos se fueron… Fui a casa del hijo mío y después me vine para acá… De ahí no supe más nada… La hermana mía sí te puede dar una declaración más de lo que yo…
-Señor Mario, ¿qué edad tiene usted?
-63
-¿Qué opinión le merece todo esto?
-Deberían estar pagando, ellos tienen que estar… Es una injusticia, pues, deberían estar presos… Pero no te creas que es fácil moverse, oíste… Hay que ir a Bolívar, a la Fiscalía, ven para acá, la hermana mía sí ha ido un poquito… Porque eso no es tampoco así, porque sabes ellos tienen más poder que uno… Hay que moverlo, andas para allá, ven para acá, y lo zumban de aquí, y de nuevo para acá… y entonces eso se ha quedado así, pues.
-¿Y usted podría identificar a los oficiales que vinieron?
-No, no, porque no los tengo, en ese momento no… decirte que los tengo a la vista no los voy a identificar, pero por lo menos la PTJ sabe quién es, los tienen identificados y saben quién es, ellos le dijeron a la hermana mía, que ella me contó, que fuera a Fiscalía a denunciar porque ellos tenían identificado y saben quién fue el policía que lo mató.
Entrevistador: Oriana Faoro
Fecha de la entrevista: 8/09/2018
Lugar de la entrevista: En la casa del entrevistado, mismo lugar del asesinato. Barrio Nuevo Mundo, San Félix.
Cantidad de audios: 1
Duración de la(s) grabación(es): 8:46
Material relacionado: El Pedro que no era
Cuando le dijeron “¿tú cómo te llamas?” dijo “bueno, yo me llamo Pedrito”, bueno, tú eres… y ahí fue la confusión… y como el que lo trajo nunca le dijo que había dos Pedritos… Por eso fue que lo mataron, por tener el mismo nombre del que andaba involucrado.
Mario Coral
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